sábado, 26 de noviembre de 2016

Pequeños o grandes, pero humildes, proyectos de investigación o experimentación, ¿te animas?

En algunas ocasiones, a veces de forma espontánea, propongo lo que yo llamo pequeñas y humildes experimentos o investigaciones. Observar, preguntar, reflexionar, pensar, planificar, experimentar, responder, comunicar...son palabras, más bien verbos, que forman parte de un hecho natural en el ser humano y un principio básico en la metodología científica: observamos y nos hacemos preguntas (hay veces que observamos y desconocemos lo que observamos, es natural que busquemos respuestas), queremos respuestas y para ello elaboramos hipótesis, finalmente llevamos a cabo experiencias (que hay que planificar) para ver si aceptamos o rechazamos nuestras suposiciones (hipótesis, o también para que surjan nuevas preguntas) Finalmente damos una explicación y la comunicamos (el acto de comunicar, difundir y compartir los resultados y sus consecuencias, no sólo es un acto de generosidad,  es lo que ha hecho progresar a la humanidad)

Fases del método científico
La idea es simple: partimos de algo que observamos y nos hacemos preguntas. Ahora realizamos hipótesis, es decir, afirmaciones que pensamos van a ser ciertas en relación a lo que nos preguntamos. 

Posteriormente pensamos (planificamos) el experimento o la investigación para intentar dar una respuesta, elegimos los instrumentos adecuados para obtener datos que nos permita justificar una respuesta coherente y sensata. Los instrumentos científicos pueden ser variados, como puede observar en el siguiente enlace obtenido de la wikipedia: instrumentos científicos. A veces no hacen falta instrumentos tan sofisticados, sino algunos de los más habituales como: regla milimetrada, hilo, compás, papel, etc. En algunas ocasiones es necesario buscar información relacionada con nuestra investigación, ya que puede ocurrir que alguien haya pensado en lo mismo y, por tanto, nos permita ahorrar trabajo y, por ejemplo, no caer en algunos errores. Ésta se puede encontrar en libros, revistas e incluso por Internet. En cualquier caso, siempre procura que sean fuentes de información fiables, es decir, que se pueda confiar en que dicha información es cierta.

Realizamos el experimento y tomamos datos relevantes que nos van a interesar para luego extraer conclusiones. Estos datos son información que es conveniente organizar, bien con tablas o gráficos, ya que normalmente son números que resultan de medir algo, y que nos ayudarán a entender mejor los mismos.

Posteriormente se intenta dar una respuesta a nuestras preguntas iniciales en base a los datos obtenidos en la experimentación y comprobando si nuestras hipótesis iniciales se cumplen o no.

Por último, siempre es conveniente redactar todo lo acontecido en nuestra investigación y comunicarlo a otras personas.

Propuesta: Tomamos un libro de texto cualquiera que tengas este curso. ¿Te has preguntado cuál es el grosor de una de sus hojas?

Eliges el libro de texto y una hoja cualquiera. Empiezas a hacer hipótesis del tipo "Creo que el grosor es de ....". Imagino que tomas tu regla e intentas medir el grosor de la hoja...llevándote una decepción porque el grosor es tan pequeño que no puedes observar con precisión su medida porque es menor que la longitud mínima que señala tu regla. ¿Qué hacer? Habrá que plantear algo que nos permite dar una respuesta a la pregunta y que valide, o no, nuestra hipótesis.

¿Te animas?



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